otitis-ninos-y-bebes.jpg

La oti­tis en los niños, es decir, la infec­ción de oído, es la enfer­me­dad más común en los bebés y en los niños peque­ños. Es la razón núme­ro 1 de con­sul­ta en los pedia­tras, repre­sen­tan­do el 35% de las visi­tas.

Los sín­to­mas de la oti­tis en los niños pue­den ser dolor del oído, fie­bre o irri­ta­bi­li­dad. Estos sín­to­mas son debi­dos tan­to a la pre­sen­cia de bac­te­rias como a virus. Si la oti­tis es cró­ni­ca pue­de cau­sar daños de audi­ción per­ma­nen­tes, oca­sio­nan­do pro­ble­mas de elo­cu­ción o de desa­rro­llo. 

Muy a menu­do se pres­cri­be a los niños la toma de anti­bió­ti­cos. Esto pue­de ayu­dar si la cau­sa es una bac­te­ria pero varios estu­dios demos­tra­ron que no son muy efi­ca­ces. Si se repi­te mucho la toma, pue­de cau­sar resis­ten­cia de las bac­te­rias pero, sobre todo, dañar mucho la flo­ra intes­ti­nal de los niños con todas sus con­se­cuen­cias.

Por otro lado, para tra­tar la oti­tis en los niños, exis­te tam­bién la opción de ope­rar al peque­ño. La ope­ra­ción más común con­sis­te en poner tubos en los tím­pa­nos para ali­viar la pre­sión de los mis­mos. Al cabo de unos meses, el tím­pano se cie­rra expul­san­do el tubo fue­ra. Hay que des­ta­car que esta ope­ra­ción se repi­te en el 20–30% de los casos. Es la segun­da ope­ra­ción más común en los niños.

Aproximadamente uno de cada dos niños acudirá al médico por este motivo en su primer año de vida.
 

Un estu­dio de un qui­ro­prác­ti­co de Nue­va York ense­ñó que el 80% de los niños que reci­bie­ron ajus­tes qui­ro­prác­ti­cos no tuvie­ron infec­ción de oído has­ta pasa­dos, al menos, 6 meses des­pués de su pri­me­ra visi­ta.
Otro estu­dio de 1996 demos­tró que el 93% de los niños con oti­tis tra­ta­dos con qui­ro­prác­ti­ca expe­ri­men­ta­ron mejo­ría. En con­cre­to, el 75% mejo­ró en menos de 10 días y el 43% lo hizo con solo una o dos sesio­nes de Qui­ro­prác­ti­ca.

Sabe­mos que el sis­te­ma ner­vio­so lo con­tro­la todo, pero las sublu­xa­cio­nes en la zona de las cer­vi­ca­les altas, lugar en el que nacen las cone­xio­nes ner­vio­sas hacia la zona del oído, favo­re­cen este pro­ble­ma.

La Qui­ro­prác­ti­ca es muy segu­ra, natu­ral y efi­caz. No daña el sis­te­ma diges­ti­vo como lo pue­den hacer los anti­bió­ti­cos y no requie­re anes­te­sia gene­ral como la ciru­gía, por eso ten­dría que ser la tera­pia de pri­me­ra elec­ción para tra­tar la oti­tis en los niños.


CENTRE QUIROPRÀCTIC LLEVANT
Poe­ta Que­rol 3, pta. 8
Tel 961 139 354

quiropracticllevant.com

La oti­tis en los niños, es decir, la infec­ción de oído, es la enfer­me­dad más común en los bebés y en los niños peque­ños. Es la razón núme­ro 1 de con­sul­ta en los pedia­tras, repre­sen­tan­do el 35% de las visi­tas.

Los sín­to­mas de la oti­tis en los niños pue­den ser dolor del oído, fie­bre o irri­ta­bi­li­dad. Estos sín­to­mas son debi­dos tan­to a la pre­sen­cia de bac­te­rias como a virus. Si la oti­tis es cró­ni­ca pue­de cau­sar daños de audi­ción per­ma­nen­tes, oca­sio­nan­do pro­ble­mas de elo­cu­ción o de desa­rro­llo. 

Muy a menu­do se pres­cri­be a los niños la toma de anti­bió­ti­cos. Esto pue­de ayu­dar si la cau­sa es una bac­te­ria pero varios estu­dios demos­tra­ron que no son muy efi­ca­ces. Si se repi­te mucho la toma, pue­de cau­sar resis­ten­cia de las bac­te­rias pero, sobre todo, dañar mucho la flo­ra intes­ti­nal de los niños con todas sus con­se­cuen­cias.

Por otro lado, para tra­tar la oti­tis en los niños, exis­te tam­bién la opción de ope­rar al peque­ño. La ope­ra­ción más común con­sis­te en poner tubos en los tím­pa­nos para ali­viar la pre­sión de los mis­mos. Al cabo de unos meses, el tím­pano se cie­rra expul­san­do el tubo fue­ra. Hay que des­ta­car que esta ope­ra­ción se repi­te en el 20–30% de los casos. Es la segun­da ope­ra­ción más común en los niños.

Aproximadamente uno de cada dos niños acudirá al médico por este motivo en su primer año de vida.
 

Un estu­dio de un qui­ro­prác­ti­co de Nue­va York ense­ñó que el 80% de los niños que reci­bie­ron ajus­tes qui­ro­prác­ti­cos no tuvie­ron infec­ción de oído has­ta pasa­dos, al menos, 6 meses des­pués de su pri­me­ra visi­ta.
Otro estu­dio de 1996 demos­tró que el 93% de los niños con oti­tis tra­ta­dos con qui­ro­prác­ti­ca expe­ri­men­ta­ron mejo­ría. En con­cre­to, el 75% mejo­ró en menos de 10 días y el 43% lo hizo con solo una o dos sesio­nes de Qui­ro­prác­ti­ca.

Sabe­mos que el sis­te­ma ner­vio­so lo con­tro­la todo, pero las sublu­xa­cio­nes en la zona de las cer­vi­ca­les altas, lugar en el que nacen las cone­xio­nes ner­vio­sas hacia la zona del oído, favo­re­cen este pro­ble­ma.

La Qui­ro­prác­ti­ca es muy segu­ra, natu­ral y efi­caz. No daña el sis­te­ma diges­ti­vo como lo pue­den hacer los anti­bió­ti­cos y no requie­re anes­te­sia gene­ral como la ciru­gía, por eso ten­dría que ser la tera­pia de pri­me­ra elec­ción para tra­tar la oti­tis en los niños.


CENTRE QUIROPRÀCTIC LLEVANT
Poe­ta Que­rol 3, pta. 8
Tel 961 139 354

quiropracticllevant.com

Comparte esta publicación

amadomio.jpg

Suscríbete a nuestro boletín

Reci­be toda la actua­li­dad en cul­tu­ra y ocio, de la ciu­dad de Valen­cia