Estos días ha hecho mucho viento en Valencia. ¡Perfecto para empinar el catxirulo! Porque aquí las tradiciones hay que cumplirlas. Y en Pascua ya sabe: comer la mona y hacer volar las cometas. Le recomendamos eso y muchas más cosas…

Esta­mos todos con el rabi­llo del ojo miran­do el tiem­po. Nor­mal. Ha lle­ga­do la Sema­na San­ta y, con ella, la Pas­cua, y hay que dis­fru­tar del tiem­po libre que nos deja este lar­go fin de sema­na que, en algu­nos casos se alar­ga has­ta el lunes de San Vicen­te en Valen­cia.

Con los nanos sin cole, hay que bus­car cosas que hacer este fin de sema­na. En Valen­cia City nos hemos pues­to las zapa­ti­llas pas­cue­ras y nos hemos echa­do a la calle para pre­pa­rar­les algu­nas suge­ren­cias. Así que tome nota por­que vamos allá.

Ya la sema­na pasa­da les reco­men­dá­ba­mos acer­car­se a los barrios mari­ne­ros de Valèn­cia para cono­cer la Sema­na San­ta Mari­ne­ra. Has­ta el domin­go con­ti­núan las pro­ce­sio­nes. Uno de los momen­tos más emo­ti­vos y a la vez más pro­pio de la cele­bra­ción valen­cia­na es el tras­la­do del San­tí­si­mo Cris­to del Sal­va­dor a la ori­lla de la pla­ya la maña­na del Vier­nes San­to.

La her­man­dad, una de las más anti­guas de la Sema­na San­ta Mari­ne­ra que per­te­ne­ce a la Parro­quia de Nues­tra Seño­ra de los Ánge­les del Caban­yal, tras­la­da la ima­gen de la cofra­día a la ori­lla de la pla­ya para hacer una ora­ción por los difun­tos en el mar y hacer una ofren­da. Es una mane­ra de recor­dar el arrai­go de la cofra­día con el barrio de pes­ca­do­res y gen­te dedi­ca­da al mar de Valen­cia.

El acto es tem­prano. Empie­za a las 7:45 en la calle Barra­ca, don­de se pro­du­ce el tra­di­cio­nal encuen­tro de los dos Cris­tos (el del Sal­va­dor y el Ampa­ro y el del Sal­va­dor). Tras una peque­ña pro­ce­sión has­ta la calle la Rei­na con la calle Ampa­ro Gui­llem don­de se des­pi­den las dos imá­ge­nes y la del Cris­to del Sal­va­dor se diri­ge a la pla­ya para la men­cio­na­da ora­ción.

La Sema­na San­ta Mari­ne­ra con­clu­ye con dos de los actos colec­ti­vos en los que par­ti­ci­pan las her­man­da­des de las cua­tro parro­quias, San­ta María del Mar, en el Grau; Nues­tra Seño­ra del Rosa­rio, en el Can­ya­me­lar; Cris­to Rede­n­­tor-San Rafael, en el Caban­yal, y Nues­tra Seño­ra de los Ánge­les, tam­bién per­te­ne­cien­te a la zona del Caban­yal.

Se tra­ta de la Solem­ne Pro­ce­sión del San­to Entie­rro. Se ini­cia el Vier­nes San­to a las 18:30 horas en la pla­za de la Vir­gen de la Valli­va­na y ter­mi­na en la pla­za del Rosa­rio.  Eso sue­le ser pasa­das las 2 de la madru­ga­da.

Ya el Domin­go de Pas­cua a las 13 horas y des­de el Mer­ca­do del Caban­yal, se cele­bra el tra­di­cio­nal Des­fi­le de Resu­rrec­ción. Los cofra­des y los per­so­na­jes bíbli­cos pro­ta­go­ni­zan un des­fi­le colo­ris­ta, en el que el luto por la Pasión y Muer­te de Jesu­cris­to da paso a la ale­gría de la Resu­rrec­ción. 

A comer la mona

A par­tir de ahí solo que­da com­ple­tar la tra­di­ción pas­cue­ra valen­cia­na yén­do­se a algún para­je natu­ral a comer­se la mona. Para los que no les de la vida para acer­car­se a Serra al Plà de Lucas, en el par­que natu­ral Por­ta Coeli en la Cal­de­ro­na, o al San­to Espí­ri­tu en Gilet, siem­pre pue­de optar por algo más urbano, como el par­que de cabe­ce­ra.

La cues­tión es encon­trar un espa­cio al aire libre en el que poder meren­dar la tra­di­cio­nal mona de pas­cua. Lo de los dul­ces valen­cia­nos de Pas­cua mere­ce capí­tu­lo espe­cial. Tene­mos tres espe­cial­men­te pen­sa­do para estos días: la mona tra­di­cio­nal de Valen­cia, el pan­que­mao (con Albe­ric como capi­tal mun­dial) o la exqui­si­ta coca de nous i pan­ses.

Si quie­re que no le den gato por mona, nos atre­ve­mos a suge­rir­les tres hor­nos de Valen­cia don­de, si lle­gan a tiem­po, pue­den com­prar las mejo­res. Para eso echa­mos manos de los que saben, el Gre­mio de Pana­de­ros de Valèn­cia (qui­zá el gre­mio más anti­guo de todos) que dio sus pre­mios esta sema­na.

El Horno Moreno Pon­ce se ha eri­gi­do como gana­dor del pri­mer pre­mio en la cate­go­ría de Mona tra­di­cio­nal de Pas­cua. El Horno L’Artesana ha resul­ta­do gana­dor en la cate­go­ría de Pan­que­mao. Y el Horno Masa­net  hace la mejor coca de nous i pan­ses.

Y natu­ral­men­te, son los días para empi­nar el catxi­ru­lo (hacer volar una come­ta, no sea mal pen­sa­do), una tra­di­ción muy valen­cia­na en Pas­cua. Por cier­to que el fin de sema­na que vie­ne, en con­cre­to el sába­do 6 de abril, se cele­bra el XXIII Fes­ti­val de Milotxes Ciu­dad de Valen­cia en la pla­ya del Caban­yal. De 11 de la maña­na a las 6 de la tar­de, todo un espec­tácu­lo de gran­des y colo­ris­tas come­tas desa­fian­do al vien­to a la ori­lla del mar.

Actividades para niños y niñas

Si todo esto le pare­ce poco, le reco­men­da­mos que bus­que un rati­to para lle­var a los peques de la casa al tea­tro. El Tea­tro Talía ha pro­gra­ma­do para este fin de sema­na (del jue­ves 28 de mar­zo al lunes 1 de abril) «Dino­sau­rios y prin­ce­sas», una obra para el públi­co infan­til.

Un niño de 11 años y su padre tie­nen que res­ca­tar a su tri­ce­ra­tops bebé rap­ta­do por unos mal­va­dos esca­pa­dos de un video­jue­go. Para ello se enfren­ta­rán a dino­sau­rios de más de cua­tro metros. Desa­fia­rán a los malos que quie­ren domi­nar el mun­do ayu­da­dos por una prin­ce­sa bai­lon­ga. Todo en el entorno de un video­jue­go. Los nanos se lo van a pasar pira­ta, se lo garan­ti­za­mos.

Otra opción es lle­var a los peques al IVAM, que ha pro­gra­ma­do toda una serie de acti­vi­da­des para la sema­na de Pas­cua. Los talle­res fami­lia­res «Jugue­to­ría» y «La gue­rri­lla de l’IVAM» son pro­pues­tas de expe­ri­men­ta­ción y jue­go en fami­lia. El obje­ti­vo: que los niños y niñas des­pier­ten su curio­si­dad por la crea­ción artís­ti­ca.

Magia y humor en el teatro

Estos días muchos de nues­tros tea­tros des­can­san, pero aún así hay más opcio­nes que por Fallas. Los que nun­ca fallan son los del Tea­tro Olym­pia que reci­ben por todo lo alto a Jor­ge Blass, uno de nues­tros mejo­res ilu­sio­nis­tas.

Su nue­vo espec­tácu­lo se lla­ma «Fli­par». Y no pue­de estar mejor ele­gi­do el nom­bre, por­que sales del tea­tro asom­bra­do de los nue­vos tru­cos de magia e ilu­sio­nis­mo que ha pre­pa­ra­do Jor­ge Blass y su equi­po. Solo para arran­car, hay 27 efec­tos de magia en tal solo 5 minu­tos. Y a par­tir de ahí es un no parar.

La otra opción es ir al Tea­tro Flu­men a ver «Los 39 esca­lo­nes, una come­dia de muer­te». Aun­que la obra de John Buchan se ha adap­ta­do en nume­ro­sas oca­sio­nes al cine, inclui­do Alfred Hitch­cock, la ver­sión tea­tral se cen­tra en la par­te cómi­ca de esta his­to­ria de espías.

La ver­sión que regre­sa aho­ra al tea­tro Flu­men es tre­pi­dan­te y con solo cua­tro acto­res, con­si­gue que casi un cen­te­nar de per­so­na­jes apa­rez­can en esce­na. La magia (escé­ni­ca en este caso) del direc­tor José Saiz.

Un paseo por los museos

No que­re­mos abru­mar­les más. Visi­tar los museos es una bue­na idea tam­bién para estos días. Des­de el IVAM (que tie­ne a Euse­bio Sem­pe­re en sus pare­des) al Cen­tro de Arte Hor­ten­sia Herre­ro, que abre todos estos días de Pas­cua. O el rena­ci­do como cen­tro de artes digi­ta­les Cen­tro Bom­bas Gens con una expo­si­ción inmer­si­va sobre Dalí.

Pero esta sema­na que­re­mos inci­dir en la expo­si­ción de Eduar­do Arro­yo en la Fun­da­ción Ban­ca­ja. Y lo hace­mos de la mano de Abe­lar­do Muñoz. Una lec­tu­ra que le acom­pa­ña­rá en la visi­ta y le hará mirar más allá de los cua­dros.

Dis­fru­ten de estos días y recuer­den rom­per el hue­vo de pas­cua en la fren­te de su pas­cue­ro o pas­cue­ra. Las tra­di­cio­nes hay que cum­plir­las.