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Ya esta­mos en 2011 y noso­tros cum­pli­mos cin­co años, un lus­tro con todos nues­tros lec­to­res y clien­tes. Mien­tras pre­pa­ra­mos el ani­ver­sa­rio, bueno será que nos ani­me­mos con las cifras de las Navi­da­des, por­que han sido bue­nas, en tér­mi­nos gene­ra­les. El con­su­mo pare­ce que se ani­ma –lo hace en EEUU, y lo hace aquí–, señal ine­quí­vo­ca de que la con­fian­za de la gen­te está mejo­ran­do.

Por pri­me­ra vez en mucho tiem­po he visi­ta­do res­tau­ran­tes lle­nos has­ta la ban­de­ra, ani­ma­dos un día sí y al otro tam­bién, sin que medie un fin de sema­na. Y de igual mane­ra, ir de com­pras ha vuel­to a ser una acti­vi­dad fre­né­ti­ca, así que es muy posi­ble que estas reba­jas inver­na­les sean las más bri­llan­tes de los últi­mos años. A tal efec­to, noso­tros les pro­po­ne­mos nue­vas sec­cio­nes de shop­ping en la ciu­dad: de la mano de Ele­na Melén­dez reco­rre­mos una calle con tra­di­ción, San Vicen­te Már­tir, en su tra­mo más cén­tri­co y en los días en que cele­bra­mos su ono­más­ti­ca. Y jun­to a Nacho Boi­ra encon­tra­mos las mejo­res opcio­nes para seguir las últi­mas ten­den­cias en las cor­ba­tas de caba­lle­ros.
O sea, que esta­mos ¡remon­tan­do! Ya no nos asus­tan las noti­cias sobre la cri­sis de la deu­da sobe­ra­na o la pug­na del euro con el yuan… Aquí y aho­ra la ciu­dad remon­ta por más que, como dice el ex de casi todo pero eter­na­men­te ele­gan­te, Anto­ni Asun­ción, esta­mos nece­si­ta­dos de polí­ti­cos de más talla, de polí­ti­cos que –esto lo digo yo–, aun sien­do baji­tos estén dis­pues­tos a dejar que suban a sus hom­bros otros polí­ti­cos para, jun­tos, poder mirar más lejos.
Pero tene­mos lo que tene­mos, y de momen­to lo que dis­fru­ta­mos es del AVE, la alta velo­ci­dad con Madrid que es un tiro: las tien­das de la esta­ción Soro­lla, lle­nas, el núme­ro de bille­tes ven­di­dos, muy alto, las expec­ta­ti­vas, infi­ni­tas… Aun­que hay que hacer las cosas bien.
José Sali­nas, uno de nues­tros gran­des pro­fe­sio­na­les de la ges­tión públi­ca, lo afir­ma con el rigor que le carac­te­ri­za: la ciu­dad tie­ne todos los bole­tos y tie­ne el AVE, pero hay que ser com­pe­ti­ti­vo, se nece­si­ta una ofer­ta turís­ti­ca bue­na y a buen pre­cio, y enton­ces, y sólo enton­ces, pon­dre­mos la direc­ta al cre­ci­mien­to en per­noc­ta­cio­nes, en reser­vas para la res­tau­ra­ción, en mayor con­su­mo en los comer­cios…
Con la lle­ga­da del AVE, Valen­cia City tam­bién se movi­li­za crean­do una nue­va sec­ción de Excur­sio­nes. Se tra­ta, pre­ci­sa­men­te, de ofer­tar un cier­to turis­mo mono­grá­fi­co, de fin de sema­na, con todas las ofer­tas de pre­cio y cali­dad.
Para empe­zar des­cu­bri­mos nues­tra joya de la coro­na: el par­que natu­ral de la Albu­fe­ra, con sus pla­yas al sur de la ciu­dad, su lago y sus arro­za­les, jus­to aho­ra que allí ani­dan miles de patos y aves. Todo un espec­tácu­lo de la natu­ra­le­za y con bue­nos res­tau­ran­tes a la vera, vera de la cos­ta y de los mar­ja­les.
 

Ya esta­mos en 2011 y noso­tros cum­pli­mos cin­co años, un lus­tro con todos nues­tros lec­to­res y clien­tes. Mien­tras pre­pa­ra­mos el ani­ver­sa­rio, bueno será que nos ani­me­mos con las cifras de las Navi­da­des, por­que han sido bue­nas, en tér­mi­nos gene­ra­les. El con­su­mo pare­ce que se ani­ma –lo hace en EEUU, y lo hace aquí–, señal ine­quí­vo­ca de que la con­fian­za de la gen­te está mejo­ran­do.

Por pri­me­ra vez en mucho tiem­po he visi­ta­do res­tau­ran­tes lle­nos has­ta la ban­de­ra, ani­ma­dos un día sí y al otro tam­bién, sin que medie un fin de sema­na. Y de igual mane­ra, ir de com­pras ha vuel­to a ser una acti­vi­dad fre­né­ti­ca, así que es muy posi­ble que estas reba­jas inver­na­les sean las más bri­llan­tes de los últi­mos años. A tal efec­to, noso­tros les pro­po­ne­mos nue­vas sec­cio­nes de shop­ping en la ciu­dad: de la mano de Ele­na Melén­dez reco­rre­mos una calle con tra­di­ción, San Vicen­te Már­tir, en su tra­mo más cén­tri­co y en los días en que cele­bra­mos su ono­más­ti­ca. Y jun­to a Nacho Boi­ra encon­tra­mos las mejo­res opcio­nes para seguir las últi­mas ten­den­cias en las cor­ba­tas de caba­lle­ros.
O sea, que esta­mos ¡remon­tan­do! Ya no nos asus­tan las noti­cias sobre la cri­sis de la deu­da sobe­ra­na o la pug­na del euro con el yuan… Aquí y aho­ra la ciu­dad remon­ta por más que, como dice el ex de casi todo pero eter­na­men­te ele­gan­te, Anto­ni Asun­ción, esta­mos nece­si­ta­dos de polí­ti­cos de más talla, de polí­ti­cos que –esto lo digo yo–, aun sien­do baji­tos estén dis­pues­tos a dejar que suban a sus hom­bros otros polí­ti­cos para, jun­tos, poder mirar más lejos.
Pero tene­mos lo que tene­mos, y de momen­to lo que dis­fru­ta­mos es del AVE, la alta velo­ci­dad con Madrid que es un tiro: las tien­das de la esta­ción Soro­lla, lle­nas, el núme­ro de bille­tes ven­di­dos, muy alto, las expec­ta­ti­vas, infi­ni­tas… Aun­que hay que hacer las cosas bien.
José Sali­nas, uno de nues­tros gran­des pro­fe­sio­na­les de la ges­tión públi­ca, lo afir­ma con el rigor que le carac­te­ri­za: la ciu­dad tie­ne todos los bole­tos y tie­ne el AVE, pero hay que ser com­pe­ti­ti­vo, se nece­si­ta una ofer­ta turís­ti­ca bue­na y a buen pre­cio, y enton­ces, y sólo enton­ces, pon­dre­mos la direc­ta al cre­ci­mien­to en per­noc­ta­cio­nes, en reser­vas para la res­tau­ra­ción, en mayor con­su­mo en los comer­cios…
Con la lle­ga­da del AVE, Valen­cia City tam­bién se movi­li­za crean­do una nue­va sec­ción de Excur­sio­nes. Se tra­ta, pre­ci­sa­men­te, de ofer­tar un cier­to turis­mo mono­grá­fi­co, de fin de sema­na, con todas las ofer­tas de pre­cio y cali­dad.
Para empe­zar des­cu­bri­mos nues­tra joya de la coro­na: el par­que natu­ral de la Albu­fe­ra, con sus pla­yas al sur de la ciu­dad, su lago y sus arro­za­les, jus­to aho­ra que allí ani­dan miles de patos y aves. Todo un espec­tácu­lo de la natu­ra­le­za y con bue­nos res­tau­ran­tes a la vera, vera de la cos­ta y de los mar­ja­les.
 

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