Una campaña del Ayuntamiento recuerda las ventajas de comprar en la tienda «de la esquina» frente a las grandes compañías de internet

Com­prar en las gran­des pla­ta­for­mas onli­ne pue­de tener sus ven­ta­jas, como, por ejem­plo, la como­di­dad o la posi­bi­li­dad de encon­trar rápi­da­men­te dife­ren­tes opcio­nes o pre­cios. Pero tam­bién tie­ne sus incon­ve­nien­tes. Y no nos refe­ri­mos a que tie­nes que espe­rar para reci­bir el pro­duc­to, o a la inco­mo­di­dad de las devo­lu­cio­nes, que tam­bién.

En reali­dad se tra­ta de cosas mucho más impor­tan­tes. Cosas que tie­nen que ver con las rela­cio­nes per­so­na­les. Por­que, ¿Se ima­gi­na alguién dicién­do­le a Ama­zon cosas como estas?: «Oye, Ama­zon, te dejo aquí al chi­qui­llo media hori­ta que me ha sur­gi­do un impre­vis­to…» o «Una cosa ama­zon, que va a venir hoy el fon­ta­ne­ro, te dejo las lla­ves y ya le abres tú…».

Estas son las cues­tio­nes que plan­tea el Ayun­ta­mien­to de Valen­cia en su cam­pa­ña para pro­mo­cio­nar las tien­das «de la esqui­na». Hacer las com­pras en los loca­les más pró­xi­mos es tam­bién una for­ma de crear una ciu­dad más habi­ta­ble para todos

A par­tir de este con­cep­to, el con­sis­to­rio ha arti­cu­la­do una cam­pa­ña de bre­ves y sim­pá­ti­cas píl­do­ras audio­vi­sua­les para redes, en las que se mos­tra­ran estos momen­tos que sola­men­te pue­den ocu­rrir en el peque­ño comer­cio, para poner en valor todo lo que nos apor­tan e invi­tar a la pobla­ción a seguir com­pran­do en el comer­cio local.