
El reparto de comida a domicilio ha sido para muchos restaurantes una vía para mantener sus negocios durante el confinamiento y, para la población, una manera de salir de la rutina de la cuarentena. Pero a medida que esta práctica se extiende, crece también la preocupación por la sostenibilidad en el envío de comida a domicilio. Así, seis de cada diez valencianos estarían dispuestos a pagar más por un delivery sostenible y el 55% de los encuestados afirma que dejará de consumir en restaurantes que no apuesten por un reparto respetuoso con el medio ambiente.
Esta tendencia de pedir comida a domicilio parece que se mantendrá en la “nueva normalidad”, ya que el 62% de los valencianos admite que recurrirá más al delivery durante los próximos meses, al no poder ir a sus restaurantes favoritos en las condiciones previas al inicio de la pandemia. Además, tres de cada cuatro (77%) creen que se generalizará por temor a compartir espacios cerrados con más personas. Son conclusiones de la encuesta realizada por Ball, el mayor productor de latas de bebida del mundo, y el Instituto IO Sondea de Investigación de Mercados entre más de 1.300 personas en todo el país.
Los envases, fundamentales en un reparto sostenible
Pero ¿qué hace a un delivery ser sostenible? Los valencianos lo tienen claro: ofrecer bebidas y comida en envases reciclables (72%), entregar en bolsas reciclables (67%) y utilizar productos de proximidad (48%) son los factores más valorados a la hora de juzgar la sostenibilidad de un restaurante. El papel de los envases en el reparto de comida a domicilio es cada vez más importante y, de hecho, el 95% de los valencianos querría que las apps de reparto o restaurantes con servicio a domicilio ofrecieran siempre la opción de elegir envases reciclables.
“El ‘delivery’ ha llegado para quedarse y la mayoría de los valencianos quieren que sea sostenible. El 62% pide que el envase utilizado en el reparto a domicilio sea de la máxima reciclabilidad. Un atributo que marca la diferencia, puesto que no solo exige que el envase se recicle, sino que, al reciclarse, conserve las mismas propiedades del original. Es el caso de la lata de aluminio, un envase que se puede reciclar infinitas veces sin perder calidad y que en solo ocho semanas después de reciclado da lugar a otro exactamente igual”, señala Cyrille Vecchi, manager de Sostenibilidad para el Sur de Europa de Ball.
Reciclaje y reciclabilidad: un paso más en la concienciación
Si bien el reparto de comida a domicilio suele estar asociado a una mayor generación de residuos, durante el confinamiento ha aumentado la concienciación de los valencianos sobre la necesidad de reciclar y hacerlo de manera correcta. Según los resultados de la encuesta realizada por Ball, el 84% deposita en el contenedor amarillo los correspondientes envases de comida y bebida del delivery.
Y no solo eso, también en el paso previo al reciclaje. La mayoría de la población (91%) también está más concienciada sobre la necesidad de elegir envases que se puedan reciclar prácticamente al 100%. Y pensando en los residuos generados por el envío de comida a domicilio, al 96% le alivia saber que los envases elegidos son reciclables y que, por tanto, podrán volver a ser usados.
Acerca de la encuesta
El Instituto IO Sondea de Investigación de Mercados ha diseñado y llevado a cabo la encuesta para el productor de latas de bebida Ball. Realizada sobre una muestra de individuos de 18 a 65 años de edad, pertenecientes al panel de Sondea, 1.340 de los cuales fueron seleccionados de forma intencional y proporcional a las cuotas de población española (INE Padrón a 1 de enero de 2019) en función del sexo, grupo de edad y CC.AA.
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