Por delan­te y por detrás / Per davant i per darre­re es una de las come­dias de más éxi­to en todo el pla­ne­ta y una decla­ra­ción de amor hacia el mun­do del tea­tro. Tra­du­ci­da a 28 idio­mas, repre­sen­ta­da en 50 paí­ses dife­ren­tes des­de su estreno en Lon­dres y vis­ta por más de 12 millo­nes de espec­ta­do­res en todo el mun­do, en 2018, esta nue­va ver­sión lle­ga al Tea­tro Talia, en una fun­ción bilin­güe (cas­te­llano y valen­ciano), dis­pues­ta a que el públi­co no pare de reír.

Sin duda, un clá­si­co que sigue más vivo que nun­ca tras más de 30 años en los esce­na­rios, a tra­vés de la nue­va adap­ta­ción de Paco Mir diri­gi­da por Ale­xan­der Herold sobre el tex­to de Michael Frayn, y aho­ra tam­bién con ver­sión valen­cia­na de Juli Dis­la. Y es que cuan­do una come­dia tea­tral es repre­sen­ta­da una y mil veces en todos los esce­na­rios posi­bles y logra en todas las oca­sio­nes con­se­guir la car­ca­ja­da del públi­co al com­ple­to.

La fun­ción trans­cu­rre mos­tran­do para­le­la­men­te esas dos caras, delan­te y detrás del esce­na­rio, vien­do a los acto­res entrar y salir de esce­na, mos­tran­do lo que de ver­dad se cue­ce tras las tablas, dispu­tas, enfren­ta­mien­tos y roces entre los intér­pre­tes.

Pero, como si esto no fue­ra sufi­cien­te, Michael Frayn nos reser­va una sor­pre­sa. En el segun­do acto gira el deco­ra­do para dejar­nos ver la far­sa deli­ran­te que tie­ne lugar entre bam­ba­li­nas: acto­res y actri­ces peleán­do­se en silen­cio mien­tras entran y salen del esce­na­rio para seguir la fun­ción como si den­tro no se estu­vie­ran matan­do.

En pala­bras de su direc­tor, Ale­xan­der Herold, es “la come­dia más diver­ti­da nun­ca escri­ta. Y esta no es mi opi­nión (aun­que por otro lado sería lógi­co des­pués de mon­tar­la nue­ve veces), sino una opi­nión amplia­men­te com­par­ti­da por millo­nes de per­so­nas en todo el pla­ne­ta.

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