Se lle­ga a Meda­lla de Pla­tino a tra­vés de la cata de los vinos que hayan con­se­gui­do pre­via­men­te la Meda­lla de Oro, y la pos­te­rior cata de éstos tie­ne como resul­ta­do los pre­mios Pla­tino.

Fin­ca La Bea­ta ha sido uno de los 7 afor­tu­na­dos en obte­ner este reco­no­ci­mien­to a nivel nacio­nal con una pun­tua­ción de 95 pun­tos, dicho galar­dón lo con­vier­te a su vez en el mejor vino de de su cate­go­ría en la zona. Es un vino pro­ce­den­te de un viñe­do Bobal tan pre­sen­te en Utiel-Reque­­na, un vie­jo viñe­do de baja pro­duc­ción (1kg/cepa), en él sus uvas son capa­ces de tras­mi­tir, al vino ela­bo­ra­do, los mati­ces, con­cen­tra­ción y com­ple­ji­dad del entorno que las rodea.

Este vino posee un color oscu­ro y pro­fun­do. Con sus aro­mas nos recuer­da a la fru­ta roja muy madu­ra y a ese mon­te tan típi­co del medi­te­rrá­neo. Con el girar de la copa ya pode­mos obser­var un vino den­so. Las sen­sa­cio­nes en boca de Fin­ca la Bea­ta ter­mi­na de demos­trar su ori­gen y per­so­na­li­dad, inten­so, sedo­so y lleno de mati­ces de fru­ta madu­ra arro­pa­dos por un final espe­cia­do y muy redon­do.

Como afir­ma Daniel Expó­si­to, enó­lo­go de Domi­nio de la Vega: “Cuan­do en Domi­nio de la Vega nos encon­tra­mos con esta fin­ca hace 20 años, en bode­ga nos dimos cuen­ta de que sola­men­te sería un gran vino dejan­do que Bea­ta expre­sa­ra todo su carác­ter y per­so­na­li­dad; así nació Fin­ca la Bea­ta, por tan­to, este reco­no­ci­mien­to, como no podía ser de otra mane­ra, hace que nues­tra satis­fac­ción sea máxi­ma al poder situar Fin­ca La Bea­ta y la Bobal en exce­len­te posi­ción. Este vino de Fin­ca es, sin duda, la expre­sión máxi­ma de nues­tro tra­ba­jo, el obje­to y espe­jo que refle­ja la his­to­ria de Domi­nio de la Vega y ser reco­no­ci­dos a nivel mun­dial supo­ne un gran orgu­llo”.

Se lle­ga a Meda­lla de Pla­tino a tra­vés de la cata de los vinos que hayan con­se­gui­do pre­via­men­te la Meda­lla de Oro, y la pos­te­rior cata de éstos tie­ne como resul­ta­do los pre­mios Pla­tino.

Fin­ca La Bea­ta ha sido uno de los 7 afor­tu­na­dos en obte­ner este reco­no­ci­mien­to a nivel nacio­nal con una pun­tua­ción de 95 pun­tos, dicho galar­dón lo con­vier­te a su vez en el mejor vino de de su cate­go­ría en la zona. Es un vino pro­ce­den­te de un viñe­do Bobal tan pre­sen­te en Utiel-Reque­­na, un vie­jo viñe­do de baja pro­duc­ción (1kg/cepa), en él sus uvas son capa­ces de tras­mi­tir, al vino ela­bo­ra­do, los mati­ces, con­cen­tra­ción y com­ple­ji­dad del entorno que las rodea.

Este vino posee un color oscu­ro y pro­fun­do. Con sus aro­mas nos recuer­da a la fru­ta roja muy madu­ra y a ese mon­te tan típi­co del medi­te­rrá­neo. Con el girar de la copa ya pode­mos obser­var un vino den­so. Las sen­sa­cio­nes en boca de Fin­ca la Bea­ta ter­mi­na de demos­trar su ori­gen y per­so­na­li­dad, inten­so, sedo­so y lleno de mati­ces de fru­ta madu­ra arro­pa­dos por un final espe­cia­do y muy redon­do.

Como afir­ma Daniel Expó­si­to, enó­lo­go de Domi­nio de la Vega: “Cuan­do en Domi­nio de la Vega nos encon­tra­mos con esta fin­ca hace 20 años, en bode­ga nos dimos cuen­ta de que sola­men­te sería un gran vino dejan­do que Bea­ta expre­sa­ra todo su carác­ter y per­so­na­li­dad; así nació Fin­ca la Bea­ta, por tan­to, este reco­no­ci­mien­to, como no podía ser de otra mane­ra, hace que nues­tra satis­fac­ción sea máxi­ma al poder situar Fin­ca La Bea­ta y la Bobal en exce­len­te posi­ción. Este vino de Fin­ca es, sin duda, la expre­sión máxi­ma de nues­tro tra­ba­jo, el obje­to y espe­jo que refle­ja la his­to­ria de Domi­nio de la Vega y ser reco­no­ci­dos a nivel mun­dial supo­ne un gran orgu­llo”.