El proyecto aborda dos pilares fundamentales para la descarbonización del transporte urbano: por un lado, la aceleración de la electrificación de las ciudades mediante recarga inteligente, gestión de la demanda y la integración de energías renovables, aprovechando tecnologías de carga bidireccional (V2G). Por otro, el impulso a alternativas al vehículo privado a través de servicios intermodales co-diseñados con la participación ciudadana y validados en entornos simulados de alta fidelidad.
La movilidad urbana sostenible da un paso adelante en la Comunitat Valenciana gracias a la colaboración entre el Instituto de Biomecánica (IBV) y el ITE, Centro Tecnológico de la Energía, en el marco del proyecto MUSoL (Movilidad Urbana Sostenible para comunidades Locales). Financiado por IVACE+i y coordinado por el IBV, esta iniciativa de I+D tiene como objetivo diseñar, validar y transferir soluciones innovadoras basadas en la electromovilidad y la intermodalidad, con el ciudadano como eje central.
Una de las claves de MUSoL es el desarrollo de una plataforma integral de datos que centraliza información procedente de sensores urbanos, datos abiertos, redes sociales, registros administrativos y fuentes empresariales. Esta información se visualiza en paneles de control interactivos que permiten tomar decisiones basadas en evidencias, facilitando una gestión más eficiente de la movilidad urbana.
Además, el proyecto incorpora un canal digital de participación ciudadana estructurado en módulos que permiten comprender el contexto, idear soluciones de forma colaborativa y validar propuestas mediante tecnologías inmersivas, como la realidad virtual. Estas simulaciones posibilitan evaluar, antes de su implementación real, aspectos como la ubicación de puntos de recarga o el diseño de estaciones intermodales, reduciendo riesgos y costes.
La inteligencia artificial desempeña un papel central en MUSoL, con modelos desarrollados para predecir la demanda de recarga a nivel de baja tensión, optimizar la recarga inteligente —incluyendo la carga y descarga bidireccional según condiciones de red, precio y disponibilidad de renovables— y mejorar la fiabilidad de las estaciones mediante mantenimiento predictivo. Asimismo, se impulsará la interoperabilidad entre sistemas con un prototipo de OCPP‑Lite, que simplifica la conexión entre estaciones de carga y plataformas de gestión.
La iniciativa cuenta con la colaboración de empresas valencianas que aportan casos de uso y datos reales. MOVUS contribuye con modelos y visualización para servicios de bicicleta compartida; DEEPSENSE, con análisis de movilidad y turismo basado en opiniones en línea; PAVAPARK, en procesos de co-creación y validaciones inmersivas; MOVEA CONSULTING, con soporte metodológico en planes de movilidad; GAIA CHARGE y COOPALBATERENSE, con datos para validar escenarios de operación; y GRUPO MOVES INNOVA, en el diseño y pruebas del prototipo OCPP‑Lite.
Caterina Tormo, responsable del proyecto en ITE, destaca que «MUSoL integra inteligencia artificial, recarga inteligente y estándares abiertos para acelerar una electromovilidad fiable, eficiente e interoperable. La combinación de V2G y predicción de demanda en baja tensión permite optimizar la red y mejorar la experiencia de usuario». Por su parte, José Solaz, director de innovación de Movilidad y Smart Cities en IBV, subraya que «la participación ciudadana y las tecnologías inmersivas permiten diseñar y validar soluciones más inclusivas y aceptadas socialmente, reduciendo riesgos y costes antes de su implementación real».
El impacto esperado del proyecto incluye una mejora sustancial en la planificación y operación de infraestructuras de recarga, reducciones del consumo energético y las emisiones, y una mayor aceptación social de las soluciones implementadas, consolidando a la Comunitat Valenciana como referente en movilidad urbana sostenible.
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