La guía de vinos mono­va­rie­ta­les que cada año publi­ca Wine UP aca­ba de ele­gir los vinos valen­cia­nos de Clos de Lôm como el vino joven más pun­tua­do entre los ela­bo­ra­dos con esta varie­dad medi­te­rrá­nea en la aña­da de 2018. El Clos de Lôm Monas­trell es un rosa­do joven que tie­ne la par­ti­cu­la­ri­dad de estar ela­bo­ra­do con las uvas de los viñe­dos más vie­jos de monas­trell que tie­ne la bode­ga en su fin­ca de Fon­ta­nars, en Ontin­yent. 

Habi­tual­men­te los viñe­dos más vie­jos pro­veen las barri­cas de los vinos de crian­za, pero en Clos de Lôm, en su afán por inno­var y bus­car la poten­cia­ción máxi­ma de las varie­da­des loca­les de la fin­ca, ha apor­ta­do por este rosa­do que, a pesar de ser su pri­me­ra cose­cha en el mer­ca­do, ha logra­do ya una Meda­lla de Oro en el Cha­llen­ge de Fran­cia y un Bron­ce en Decan­ter, ade­más de lograr pun­tua­cio­nes por enci­ma de 90 pun­tos en dife­ren­tes revis­tas. 

El blan­co de Clos de Lôm, ela­bo­ra­do con mal­va­sía, tam­bién ha logra­do una exce­len­te pun­tua­ción al que­dar en segun­da posi­ción entre los de su cate­go­ría, mien­tas que el tin­to Clos de Lôm Tem­pra­ni­llo 2018 se codea entre los sobre­sa­lien­tes al supe­rar los exi­gen­tes noven­ta pun­tos. 

Des­de la bode­ga Clos de Lôm se feli­ci­tan por­que la guía cata a cie­gas todos los mono­va­rie­ta­les y com­pi­ten por varie­da­des sin impor­tar aña­das ni tipos de ela­bo­ra­ción, de modo que los jóve­nes de la bode­ga se han codea­do inclu­so con céle­bres vinos enve­je­ci­dos que habi­tual­men­te se pun­túan más que los jóve­nes, que via­jan a la bote­lla des­nu­dos de made­ra, ape­nas con la “ropa” que apor­tan cepas, sue­los y el año meteo­ro­ló­gi­co.