La Confederació d’Empresaris del Comerç Servicis i Autònoms de la Comunitat Valenciana, Confecomerç CV ha resaltado la buena “acogida” en el arranque de la fase 1 del Plan de Desescalada del sector del pequeño comercio en toda la Comunitat Valenciana con la apertura de la gran mayoría de los establecimientos. El sector afronta con “ilusión” esta reactivación, que supone un “balón de oxígeno”, siendo la reapertura el inicio del camino hacia la reconstrucción económica, y por la expectación generada entre los clientes en el arranque de esta nueva etapa.
El sector ha implantado todas las medidas en materia de seguridad y salud, siguiendo las indicaciones y directrices marcadas por los protocolos del Ministerio y de la Generalitat y afronta esta fase 1 como el momento de poner de nuevo en marcha las pequeñas empresas, paralizadas durante dos meses, tras el grave impacto sufrido por el Covid-19.
El presidente de Confecomerç CV, Rafael Torres ha destacado “el enorme esfuerzo realizado por el sector y la inversión realizada en EPI´s y en medidas de protección para garantizar la plena seguridad y salud, siendo un objetivo prioritario dotar de la máxima tranquilidad a los clientes, cumpliendo estrictamente con las indicaciones marcadas por las autoridades públicas”.
Por lo que respecta a los pequeños comercios de las 10 áreas de salud que desde el pasado lunes permanecían en fase 1 destacar que la reapertura fue secundada por la práctica totalidad de los establecimientos y la completa normalidad en el servicio, resaltando la expectación generada por parte de los clientes.
Desde Confecomerç CV se prevé que el consumo se vaya recuperando de manera progresiva, si bien se requieren iniciativas que contribuyan a fomentar la actividad comercial para poder incentivar y potenciar el sector, ya que el negocio se ha visto resentido por un cierre prolongado, en el que el empresario ha debido asumir los costes derivados del comercio sin percepción de ingresos por ventas.
Destacar que en esta fase 1, el colectivo de mayores de 65 años tiene un horario de atención de servicio prioritario y que el cliente tiene total permisividad para poder realizar sus compras a lo largo del día, al igual que ocurre para efectuar la compra de bienes esenciales, no estando sujeto a determinadas franjas horarias.
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