La Sala Rus­sa­fa se ha vis­to obli­ga­da a sus­pen­der las repre­sen­ta­cio­nes pre­vis­tas de Acor­dar­se de las cosas bellas por cau­sas de enfer­me­dad entre los miem­bros del repar­to. El espec­tácu­lo iba a estre­nar­se este jue­ves 5 de diciem­bre con fun­cio­nes duran­te todo el fin de sema­na.

El tea­tro devol­ve­rá el impor­te de las entra­das adqui­ri­das por ven­ta anti­ci­pa­da y ha lamen­ta­do las moles­tias oca­sio­na­das al públi­co intere­sa­do en ver esta pie­za, que se enmar­ca en su IX Cicle de Com­pan­yies Valen­cia­nes, que arran­ca­rá tras las navi­da­des.

Camel­Cat regre­sa a la Sala Rus­sa­fa com ¿A qué sabe la luna?

Sí se man­tie­ne la pro­gra­ma­ción fami­liar para el fin de sema­na con el regre­so a Sala Rus­sa­fa de una de las pie­zas más que­ri­das por sus peque­ños espec­ta­do­res, que ago­tó loca­li­da­des la últi­ma oca­sión que visi­tó el tea­tro. El 7 y 8 de diciem­bre, dos nue­vas opor­tu­ni­da­des para dis­fru­tar de ¿A qué sabe la luna?

La com­pa­ñía madri­le­ña Camel­Cat Pro­duc­tions fir­ma la ver­sión tea­tral del popu­lar cuen­to homó­ni­mo de Grej­niec Michael, que habla de la impor­tan­cia de tra­ba­jar en equi­po y de la posi­bi­li­dad de alcan­zar los sue­ños.

La cuen­ta­cuen­tos Sara Luna uti­li­za títe­res de gran for­ma­to­pa­ra narrar la his­to­ria de un gru­po de ani­ma­les que desea des­cu­brir el sabor del astro que ilu­mi­na la noche. Can­sa­dos de inten­tar­lo cada uno por su cuen­ta, inven­ta­rán un modo para inten­tar alcan­zar­la todos jun­tos y des­cu­brir no solo el sabor de la luna, sino tam­bién de las amis­ta­des que irán sur­gien­do entre ellos. Una deli­cio­sa fábu­la para espec­ta­do­res a par­tir de 2 años. 

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