La exposición individual del artista valenciano se inaugura el viernes 26 en la galería Vangar

En su segun­da expo­si­ción en su nue­vo espa­cio de la calle de Pedro III nº 22, inau­gu­ra­do el pasa­do mes de abril, Van­gar pre­sen­ta la expo­si­ción indi­vi­dual del artis­ta Lluc Mar­grau. En la mues­tra, que tie­ne por títu­lo Des­de aho­ra y des­de siem­pre, el artis­ta valen­ciano pre­sen­ta nue­vas obras en papel y obras escul­tó­ri­cas, que giran en torno al con­cep­to de memo­ria.

En pala­bras de Ester Alba, auto­ra del tex­to crí­ti­co de la mues­tra: «A tra­vés de las pie­zas de esta expo­si­ción, Lluc Mar­grau nos aden­tra en el con­te­ni­do poli­sé­mi­co del con­cep­to de memo­ria, en su doble sig­ni­fi­ca­ción: una refle­xión en torno a cómo la cul­tu­ra glo­bal, huma­nis­ta, ha ido cedien­do su pro­ta­go­nis­mo al “uni­ver­so con­cre­to y social”. Vivi­mos en la socie­dad efí­me­ra, pro­du­ci­da para con­su­mir rápi­da­men­te y dese­char».

«Con su poé­ti­ca per­so­nal —aña­de Alba— «Lluc Mar­grau con­me­mo­ra la emo­ción de la vida vivi­da, de la expe­rien­cia reme­mo­ra­da o de la emo­ción recor­da­da. Un pro­ce­so que es per­so­nal e ineluc­ta­ble, pero que al mis­mo tiem­po es uni­ver­sal. Des­de una pers­pec­ti­va de las emo­cio­nes, la com­pren­sión de la memo­ria, su sig­ni­fi­ca­do y su valor, se nos des­ve­la como nece­sa­ria en el pro­ce­so de inda­ga­ción de lo here­da­do, pero tam­bién de lo per­di­do, pues per­mi­te apre­ciar de qué mane­ra se han man­te­ni­do, des­trui­do o muta­do los recuer­dos».

La expo­si­ción cuen­ta con un pro­gra­ma que se ini­cia­rá maña­na vier­nes con la inau­gu­ra­ción de la mues­tra en Van­gar. Con­ti­nua­rá a mitad de junio (19–22 de junio) con la rea­li­za­ción por par­te de Lluc Mar­grau, jun­to a Car­les Llonch, artis­ta de Van­gar, de una ins­ta­la­ción artís­ti­ca den­tro del mar­co de la V Edi­ción del Fes­ti­val dels Horts, que se cele­bra en Villa Rosi­ta (Pican­ya).

A fina­les de junio (25 de junio), ten­drá lugar en Van­gar el con­cier­to Noi­se Peri­té, un con­cier­to de músi­ca oní­ri­ca, impro­vi­sa­da y efí­me­ra con gui­ta­rra acús­ti­ca y efec­tos de soni­do. Músi­ca expe­ri­men­tal para una ban­da sono­ra ima­gi­na­ria, de la mano de Rober­to Mar­tín Maza­rio.

El pro­gra­ma ter­mi­na­rá a media­dos de sep­tiem­bre, con la cola­bo­ra­ción de Lluc Mar­grau jun­to a la mar­ca de mobi­lia­rio Teu­lat. Pre­sen­ta­rán una colec­ción de obje­tos de dise­ño que han desa­rro­lla­do con­jun­ta­men­te. Esta serie limi­ta­da bus­ca des­ta­car la iden­ti­dad local y la arte­sa­nía a tra­vés de la repre­sen­ta­ción de ele­men­tos del ima­gi­na­rio valen­ciano.

Otras de las obras de Lluc Magrau.

Biografía

Lluc Mar­grau (Valen­cia, 1987) es un artis­ta mul­ti­dis­ci­pli­nar que cur­só la licen­cia­tu­ra de Bellas Artes en la Uni­ver­si­dad de Cas­ti­lla la Man­cha 2012. Ha desa­rro­lla­do su carre­ra artÍs­ti­ca entre Espa­ña y EEUU. Ha reci­bi­do becas de estan­cia en EEUU, como la Beca Ruth Katz­man con­ce­di­da por The Art Stu­dents Lea­gue of New York o la beca de resi­den­cia en Ver­mont Stu­dio Cen­ter, Nue­va York, entre otras. Des­de el año 2020 su obra for­ma par­te de la Colec­ción de Arte Con­tem­po­rá­neo de la Gene­ra­li­tat Valen­cia­na.

Su prác­ti­ca artís­ti­ca se cen­tra en las rela­cio­nes que man­te­ne­mos con los espa­cios que habi­ta­mos. El artis­ta se ins­pi­ra el jue­go entre los espa­cios pri­va­dos y públi­cos y las expe­rien­cias que sur­gen en ellos, que son al mis­mo tiem­po muy per­so­na­les y uni­ver­sa­les.

Con su tra­ba­jo, Lluc Mar­grau bus­ca crear un com­pro­mi­so que atra­vie­se estas esfe­ras de lo que con­si­de­ra­mos indi­vi­dual y común, y uti­li­zar la inter­ac­ti­vi­dad como medio para rom­per esta fron­te­ra. Para ello, uti­li­za los len­gua­jes de la arqui­tec­tu­ra, la car­to­gra­fía y ele­men­tos efí­me­ros como la luz y el tiem­po.

Cada pro­yec­to del artis­ta es una línea de inves­ti­ga­ción sobre este tema, ofre­cien­do una nue­va pers­pec­ti­va y visión sobre los espa­cios habi­ta­dos. Gran par­te de su tra­ba­jo es inter­ac­ti­vo, lo que per­mi­te al espec­ta­dor adop­tar su pro­pio enfo­que indi­vi­dual de la obra.

Comparte esta publicación

amadomio.jpg

Suscríbete a nuestro boletín

Reci­be toda la actua­li­dad en cul­tu­ra y ocio, de la ciu­dad de Valen­cia